lunes, 4 de junio de 2007

Y DESPUÉS... ¿QUÉ?...

Y DESPUÉS.... ¿QUÉ?...

Hemos venido sufriendo, y sufriendo con paciencia y buena voluntad, el bombardeo a que nos han sometido, prensa, radio, tv, y todos los medios de comunicación; repito, bombardeo y me quedo corto. Con las dichosas elecciones.

Afortunadamente, pasó, han pasado. Y ahora... ¿qué?

Yo estoy, asombrado, anonadado, incrédulamente apabullado, con los resultados. Nadie ha perdido. Todos han ganado. Señores. ¡ Esto no es serio!

Pueden ocurrir dos cosas o que el pueblo llano no entiende o que los políticos nos engañan, casi, como siempre. No pertenezco a ningún partido, ni creo que perteneceré jamás. Me han llamado de más de uno, pero... pero yo siempre he pensado, que de esta forma no tenía que votar, cuando alguien levantara la mano y que mi libertad valía más que mi obediencia ciega.

Así, tenemos que los partidos mayoritarios, los que más votos han tenido y que tiene representación en toda España. Unos con más votos, tienen menos concejales y otros con menos votos, tienen mas concejales.

Ya sé que me dirán que la culpa de eso, la tiene la Ley que está en vigor. Señores padres de la Patria. Cuando una Ley se demuestra que no funciona lo mejor es cambiarla.

Si se pretende reformar la Constitución, creo que no es justo, que la Ley para las votaciones, siga en vigor con estos defectos.

La segunda parte, viene ahora. Los pactos, los arreglos, las chapuzas y sus posteriores consecuencias.

Ejemplos, muchos. El primer tripartito, saltó por los aires. El segundo donde unos señores, que no se consideran españoles, forman parte de él y es más, pide la independencia de su país, nación o simplemente (mientras no se demuestre lo contrario), autonomía.

Yo quisiera saber, a nivel de España lo que cuestan unas elecciones o mejor dicho, lo que le cuesta a Juan Español, entre autobuses, propaganda, locales, comidas, viajes, aviones, helicópteros, posteriores subvenciones... etc. etc.

En el etc. incluyo lo que se me haya olvidado.

Junto con mi familia acudo obediente y sumiso, a la hora correspondiente. Voto. Igual que muchos habitantes de mi pueblo. Se abren las urnas. Desde el primer momento se auguran los resultados, donde A tiene 9 votos, B otros 9 y C, 3 votos. Lo que indica que al C, no lo vota casi nadie, pocos. Ahora serán los que impongan sus condiciones. O lo tomas o lo dejas. Podrá ser legal, creo que justo, no.

La Ley D´Hont, debe pasar a mejor vida y no sería ningún disparate que igual que ocurre con las votaciones del Senado, se votase a las personas, no a los partidos, y así formarían todas las instituciones, siempre las personas mas votadas y no sería necesario hacer estos cambalaches, estas cosas raras, o estos tratos. O lo que es lo mismo, listas abiertas.

Hablo de tratos, puesto que detrás, de un pacto hay concesiones, que no siempre son justas. Lo que sí puedo afirmar sin temor a equivocarme. Es que siempre cuando nos preguntamos. Y después... ¿qué?..

Señores siempre lo paga Juan Español

Por último me gustaría recordar a los políticos, del color que sean, que las obras buenas o malas, grandes o pequeñas, mejores o peores; siempre las realizan hombres o mujeres, honrados y trabajadores, con ilusión y con ganas, en definitiva no buscan la fama, ni el sillón, ni el poder, ni grandes cargos y además siempre son personas generosas, altruistas y trabajadoras.

CBNM.-

1 comentario:

Anónimo dijo...

No creo que los políticos siempre mientan, o por lm menos como dice, "casi siemrpe".-